Resulta imposible encontrar una sola palabra, un sinónimo para describir lo que es la cultura en Hermosillo, pues hablar de ello en nuestra naranja ciudad es hablar de su gastronomía, sus festividades, del Cerro de la Campana, las artesanías Comcaác, usos y costumbres, los naranjos, su música regional, sus costas, e incluso de su intensa paleta de colores que disfrutamos en los espectaculares y ya mundialmente famosos atardeceres que a diario la naturaleza nos regala. Todas estas cosas nos identifican como habitantes y ciudadanos.

En la Ciudad del Sol, cultura e identidad son la misma cosa. Nuestras raíces y tradiciones, nos caracterizan.

El primer asentamiento humano formado por un grupo de indígenas pimas se dio el 18 de mayo de 1700, en las inmediaciones de la actual presa Abelardo L. Rodríguez, donde se formó una aldea llamada la Santísima Trinidad del Pitic. Posteriormente se dio origen a la ciudad de Hermosillo gracias a nuestros fundadores: el militar español Juan Bautista de Escalante, el misionero Jesuita Adamo Gil y el jefe indio Pima Pedro Baricua. Desde su fundación, nuestra ciudad y nuestra historia es compartida y entrelazada.

Esto se puede ver claramente en las festividades que celebramos en el Ayuntamiento para conmemorar y recordar quiénes somos: en el ámbito artístico y urbano se lleva a cabo cada mayo el aniversario de la fundación de nuestra ciudad a través de las Fiestas del Pitic en la cual se reúnen las manifestaciones artísticas y expresiones culturales de nuestros artistas y creadores.

El primer asentamiento humano formado por un grupo de indígenas Pimas se dio el 18 de mayo de 1700, en las inmediaciones de la actual presa Abelardo L. Rodríguez, donde se formó una aldea llamada la Santísima Trinidad del Pitic

Hermosillo cuenta con una infraestructura cultural que consta de teatros públicos y privados, casas de la cultura desde donde se imparten talleres y se gestan proyectos artísticos, museos de arte, históricos, de antropología y costumbristas.

Asimismo, los monumentos y edificios históricos de Hermosillo son patrimonio tangible importante por su valor artístico e histórico.

La identidad cultural de Hermosillo reside también en su gente. En años recientes, el Instituto Municipal de Cultura y Arte instaló la Ruta Escultórica de la Identidad, proyecto que consiste en seis esculturas urbanas de tamaño natural que se encuentran distribuidas en distintos puntos de nuestro municipio.

A través del arte se busca plasmar la esencia de los habitantes cotidianos de nuestra ciudad, por ende, cada escultura representa un personaje tradicional: una enfermera, una niña jugando con una paloma, una pareja Comcaác, el paletero, un vendedor de pitahayas y una mujer Triqui.

Recientemente, algunas calles, bardas, parques, puentes y edificios de Hermosillo se han visto intervenidas por una manifestación artística propia del siglo XX: el arte urbano. Podemos ver a través de las calles de Hermosillo hermosos lienzos urbanos por medio de los cuales nuestros artistas se expresan, pero aún más, han sabido traducir quiénes somos. Basta con ver la paleta de colores que han empleado, las temáticas históricas, la flora y fauna, así como personajes de leyendas urbanas hermosillenses… todos estos elementos se inmortalizan en estos espacios.

De esta manera. el arte urbano abona a la democratización y perpetuación nuestra identidad cultural, haciendo visible los íconos y símbolos que nos representan y así hacerla visible hacia todo ciudadano y transeúnte de nuestra ciudad.

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